Enviar periódicamente a tus suscriptores newsletters, es decir correos electrónicos con información que quieras compartir con ellos, puede tener muchas ventajas, pero cada vez resulta más difícil diseñarlas.
Cada día aparecen nuevas funcionalidades y tecnologías, así que para la mayoría de la gente, las tendencias para crear newsletters cambian demasiado rápido como para estar al día. Pero si no sigues lo que se hace en el mercado, tus suscriptores empezarán a darse cuenta de que tus correos ya no tienen un aspecto tan “moderno” como otros que reciben.
Para no perder comba, y ahorrarte el proceso de prueba y error, te vamos a contar todo lo que necesitas para diseñar una newsletter que destaque en 2025.
En esta guía, comentaremos los elementos visuales que ha de tener cualquier buena newsletter, y después explicaremos cómo diseñar cada una de las partes para que queden perfectas. También te daremos algunos consejos profesionales sobre cómo diseñar una newsletter y resolver el problema de que funcione en diferentes tamaños de pantallas y apps de correo.
Diseño de una newsletter: 5 componentes esenciales
¿Cómo conseguir que tus campañas de email marketing destaquen? Lo primero, deberían ser adecuadas para tu audiencia y sector. Por ejemplo, si principalmente envías contenido educativo, podría ocurrir que lo que mejor te funcione en tus correos sea, de hecho, un formato sencillo solo con texto, que es lo que llevaría el peso del mensaje, sin que tengas que preocuparte mucho de los elementos visuales.
Pero si estás en un sector en el que, para llamar la atención, hay que enviar newsletters vistosas, deberías incluir estos seis aspectos de una manera u otra:
- Logo y dirección de correo del remitente
- Encabezado
- Elementos visuales en el cuerpo del email
- Texto del cuerpo
- Llamadas a la acción
- Pie del correo
Cuando empieces a diseñar los correos electrónicos de tu campaña, puedes utilizar la lista anterior para no dejarte ningún elemento. Sin embargo, no basta con saber qué necesitas, también tienes que saber cómo diseñar cada una de las partes. Entremos en más detalle en cada una de ellas, viendo también cuáles son las buenas prácticas para diseñarlas y cumplir con lo que tus contactos esperan.
1. Añade el logo del remitente y utiliza una dirección de confianza
El proceso para crear una impresión positiva empieza incluso antes de que alguien abra tu email, y añadir el logo del remitente te ayuda a conseguirlo.
Así es como queda nuestro logo (animado):
Actualmente, hay dos formas diferentes de configurar logos de remitente, pero ninguna de ellas es totalmente compatible con todos los proveedores de correo. Sin embargo, si usas Gmail y Google Workspace (los servicios de correo electrónico más utilizados, con mucha diferencia): hay una forma fácil de configurar un logo animado (en inglés), simplemente sigue las instrucciones de nuestra detallada guía.
Si utilizas Yahoo Mail o Apple, necesitarás añadir un registro BIMI en los ajustes de tu dominio.
Junto con el logo y nombre del remitente, también se muestra su dirección de correo. Es muy importante que tu dirección de email transmita confianza y cumpla con las buenas prácticas.
2. Utiliza encabezados atractivos en tus newsletters
Fuente: Olipop (ReallyGoodEmails)
El encabezado no es más que lo que escribes arriba del correo, que será lo primero que leerán tus contactos cuando lo abran, así que es una parte importantísima. Ese es el motivo de que muchas marcas coloquen su logo en el encabezado, por ejemplo
Ahora que tu lector ha abierto ya tu email, es el momento de priorizar los elementos visuales. Quieres deslumbrarle con algo que dé buena impresión, y el encabezado marca la tónica de lo que será el resto. Utiliza algo vistoso, tu logo es una buena elección, ya que es un buen elemento visual y crea marca, además de recordarle a tu lector quién envía el correo.
Para que el encabezado quede lo mejor posible, es mejor que sea minimalista. No intentes apiñar demasiados enlaces, imágenes ni colores. Si eliminas el desorden, también eliminarás las distracciones y permitirás que las partes que quedan se vean mejor. En nuestro ejemplo anterior de diseño de newsletter, puedes ver cómo el correo de Olipop es simple, con solo tres enlaces, una fuente neutra y su logo como único elemento visual (que a su vez también es muy sencillo).
También es buena idea utilizar el mismo encabezado en todas las campañas por email que vayas enviando. Por supuesto, puedes actualizarlo de vez en cuando, pero en general es mejor mantenerlo igual para que el lector aprenda a reconocerlo después de unos pocos correos.
3. Utiliza una jerarquía visual en el diseño del cuerpo
Pasemos ahora al plato principal, los elementos visuales del cuerpo del email. Este es el contenido que tus lectores quieren ver, sea para leer noticias, conocer información sobre una promoción o incluso comprar. Sin embargo, a diferencia de las otras partes de una newsletter, el cuerpo puede diseñarse de forma muy libre.
Una advertencia antes de entrar en los detalles: algunos usuarios deshabilitan las imágenes de sus correos electrónicos, así que tenlo en cuenta cuando hagas el diseño. Te podría interesar tener textos secundarios en los que repitas el mensaje para que puedan leer la idea principal, incluso sin las imágenes.
El contenido dependerá de tu empresa y de tu audiencia, aunque a la hora de organizar y mostrar tu contenido sí hay algunos métodos que funcionan para todo el mundo.
Primero, tienes que plantearte el diseño de tu newsletter igual que si estuvieras diseñando una página web, ya que las dos tienen dificultades y objetivos similares (como por ejemplo hacer avanzar a tus visitantes por tu túnel de ventas). Igual que cuando diseñas una web, céntrate en la jerarquía visual y en que las imágenes fluyan.
Con esto me refiero a que tienes que usar estrategias de diseño gráfico (como tamaños, colores, formas, tipografía y espacios en blanco) para conseguir que algunas partes de tu correo se vean antes que otras (por ejemplo, quieres que tus llamadas a la acción destaquen, no tu aviso legal).
Fuente: BetterBrand (ReallyGoodEmails)
En el ejemplo anterior de una newsletter de la empresa de tecnología alimentaria BetterBrand, ¿te has fijado en cómo cada parte del sandwich está tocando o está muy cerca de la siguiente? Este diseño utiliza una jerarquía y un guiado visual para dirigir la vista del lector hacia abajo, en vez de que vaya de izquierda a derecha, que es lo que la mayoría de nosotros hacemos instintivamente.
También es importante dejar mucho espacio vacío, o “espacios en blanco”. En diseño, el espacio en blanco son las partes de la composición que no contienen nada. Dejar espacio vacío no solo evita las distracciones, sino que también dirige la atención a los elementos visuales que sí hay, dándote un mayor control sobre en qué se fijará tu lector.
Fuente: Clay (ReallyGoodEmails)
La empresa Clay, un software que permite gestionar las relaciones con tus contactos, utiliza muy bien tanto la jerarquía visual como los espacios vacíos en este correo. Dirige la atención desde la parte superior hacia la flor que hay en la parte inferior siguiendo una cadena visual vertical, dejando mucho espacio vacío en los laterales para que el lector se centre en los elementos visuales principales.
En cuanto a las decisiones creativas como el color y la tipografía, lo mejor es ceñirte a los propios de tu marca. Seguramente, tu empresa ya ha elegido los colores, las fuentes y el tono de comunicación más adecuados para tu audiencia, y reutilizar estos mismos elementos refuerza las asociaciones con tu marca. En otras palabras, cuando tus lectores vean estos elementos, pensarán en tu empresa.
Por ese mismo motivo, asegúrate también de incluir tu logo en algún sitio del correo. Si no está en el encabezado o en el pie, colócalo de forma creativa en alguna parte del cuerpo del email.
Por último, puede que ya sepas utilizar imágenes de alta resolución, pero también deberías optimizarlas o comprimirlas. Igual que ocurre con las páginas web, las imágenes muy pesadas hacen que los tiempos de descarga sean muy largos, especialmente en el caso de los correos. Por eso, comprime las imágenes para reducir el tamaño del fichero antes de añadirlas.
4. Utiliza texto como apoyo de los elementos visuales
Salpicado entre las imágenes de tu diseño estará el texto de tu newsletter. Este texto juega un papel secundario frente a las imágenes, pero es necesario para transmitir la información que deseas compartir.
Igual que ocurre con otras partes del diseño de una newsletter, con el texto, menos es más. Da más importancia a los elementos visuales y solo utiliza el texto que sea necesario. Cuando tengas algo que decir, hazlo utilizando las menos palabras posibles.
Y, como los aspectos visuales son tan importantes, presta mucha atención a la tipografía. Las fuentes, los tamaños del texto y los estilos, como negritas o cursivas, son también elecciones visuales. Toma estas decisiones teniendo en cuenta tanto las preferencias de tu audiencia como tu imagen de marca o la imagen que quieres dar de tu empresa.
Por ejemplo, las fuentes de tipografía romana (o serif, con letras que acaban con un pequeño remate, o serifa) se consideran más formales y profesionales, mientras que las de palo seco (o sans serif) son más cercanas e informales. Elige la que mejor represente a la imagen que quieres dar de tu marca.
Fuente: Alice (ReallyGoodEmails)
Fíjate en cómo utiliza las cursivas en el ejemplo anterior la marca de chocolate con hongos funcionales Alice. Por un lado, permiten destacar las principales funcionalidades y argumentos de venta, pero también hacen que el correo quede más bonito. Leer líneas seguidas de texto puede resultar aburrido, así que una cursiva marcada puede darle un toque de interés.
5. Resalta tus llamadas a la acción
En gran medida, las llamadas a la acción (o CTA) son la razón principal por la que se envían emails masivos. Es el botón o enlace que dirige a los lectores hacia donde te interesa que entren, tanto si es una página de producto, un perfil de redes sociales, una página de suscripción, o lo que sea que necesites para tu estrategia de marketing.
Hay mucho que decir sobre cómo crear una CTA eficaz, pero ahora nos centraremos solo en el diseño visual. Lo principal que hay que recordar es que tu llamada a la acción ha de ser la parte de tu correo que más resalte.
Te interesa que tu llamada a la acción destaque, no solo para que tus lectores la vean, sino también para que les resulte más “tentadora”. Cuantos más lectores vean tu CTA, más probable es que hagan clic. Esa es la razón de que normalmente sean botones separados del resto del diseño, aunque en determinadas ocasiones también pueden funcionar las llamadas a la acción solo de texto.
En concreto, utiliza técnicas de diseño que creen contraste. La estrategia más habitual es crear el contraste con colores, haciendo que el botón de la CTA tenga el color contrario al del fondo, por ejemplo negro sobre blanco, o azul sobre amarillo. También funciona el contraste de tamaños, por ejemplo podrías hacer que el botón sea más grande que los elementos que lo rodean.
También deberías evitar tener diferentes llamadas a la acción que compitan entre ellas y quedarte con solo una o dos situadas en el mismo sitio. De esta manera, realmente podrás enfocar tus esfuerzos en un objetivo en vez de dispersar a tu audiencia. Si quieres promover dos enlaces diferentes a la vez, siempre puedes enviar una segunda campaña.
Algunas newsletters están diseñadas como un catálogo o un índice de contenidos, con varios enlaces que llevan a diferentes secciones en función de lo que le interese al lector. Esto está bien, pero para todos los otros tipos de llamadas a la acción, es mejor que sea una sola la que reciba toda la atención.
Fuente: Squarespace
¿En qué es lo primero que te fijas de este correo de Squarespace? El botón de llamada a la acción en un negro intenso y situado bastante arriba destaca perfectamente con el fondo en gris claro.
6. Haz que el pie de correo sea discreto
Fuente: Wix
Si la llamada a la acción ha de ser la parte que más destaca de un buen diseño de newsletter, el pie ha de ser lo que menos se note. Además de los iconos de redes sociales, en el pie es donde colocas las secciones obligatorias (como el botón de cancelar la suscripción y las notas legales) o de información general, como la dirección de tu empresa.
El pie ha de ser discreto para que la atención de tus lectores se centre en el cuerpo del correo, así que diséñalo de forma que quede integrado sin destacar demasiado. Algunas estrategias concretas consisten en utilizar un color más claro, como el gris, para el texto o reducir el tamaño.
Algunas empresas utilizan el pie como barra de navegación, donde colocan enlaces a todas las páginas de su web, incluidas las menos populares, como las páginas de “Sobre mí” o de contacto. Como el pie se diseña para que no interfiera con el resto, estos enlaces no deberían competir con tu CTA principal.
Otros aspectos del diseño de newsletters
Hemos hablado de los principales elementos visuales de una newsletter, pero por supuesto, esto solo es una parte del puzzle. A la hora de diseñar los correos de tus campañas de email marketing, los siguientes consejos son igual de importantes y has de tenerlos presentes:
1. Diseña los correos para las diferentes apps y tamaños de pantalla
Como en las newsletters las imágenes son tan importantes, tienes que asegurarte de que siempre se muestren correctamente, independientemente del dispositivo o la aplicación de correo con el que se lean.
Aunque muchas personas siguen leyendo sus correos en ordenadores de sobremesa, prácticamente el 50% de los emails se abren en dispositivos móviles (artículo en inglés). Como hay muchos tipos diferentes de teléfonos y tamaños de pantalla, tienes que prestar mucha atención a que el diseño de tu newsletter quede bien en todos ellos.
Lo primero, utiliza una única columna. Usar dos columnas podría tener ventajas, pero te la juegas con determinados tamaños de pantalla. Una parte del email podría quedar cortada y forzar al lector a irse desplazando horizontal y verticalmente, que puede ser molesto. Para los diseños que se adaptan a diferentes tamaños de pantalla, cuanto más estrecho, mejor.
De igual manera, el texto también ha de ser lo suficientemente grande como para que se vea bien incluso en las pantallas más pequeñas. El texto del cuerpo ha de ser, al menos, de 14 puntos y los títulos de más de 20, así tus textos podrán leerse desde cualquier equipo.
No te olvides tampoco de que en los teléfonos móviles se utilizan controles táctiles, por lo que se interacciona de forma algo diferente que en los ordenadores de escritorio. En concreto, tus enlaces han de ser suficientemente grandes como para poder hacer clic en ellos, especialmente tu botón de llamada a la acción.
Si te preocupa conseguir que tu diseño sea adaptable, o si tus suscriptores tienen una gama especialmente grande de teléfonos diferentes, te podría interesar usar una plantilla.
2. Empieza bien con un buen asunto
El asunto es la puerta de entrada a que el lector abra el correo, así que sin duda es la parte más importante de tu diseño. Un buen asunto conseguirá que tu email se abra inmediatamente y con entusiasmo, mientras que uno malo hará que lo envíen a la papelera sin piedad, o incluso que cancelen la suscripción.
Sobre todo, sé conciso. Tu asunto va a quedar enterrado entre muchos otros, y los lectores solo darán un vistazo rápido para decidir cuáles leer. Por eso, necesitas decir algo interesante utilizando la menor cantidad posible de palabras y un lenguaje claro.
Idealmente, limítate a unas 7 palabras o 41 caracteres, que es lo que cabe en la vista previa de la mayoría de las apps de correo, así te aseguras de que no se corte.
Otro consejo es que uses un lenguaje proactivo; es decir, frases que empiecen por un verbo en imperativo. Por ejemplo, en vez de decir “Puedes conseguir este descuento ahora”, di “Consigue ya este descuento”.
El lenguaje proactivo suele aumentar las conversiones, ya que sugiere qué hacer a los que aún están indecisos. Y también permite reducir el número de palabras para que tus asuntos sean breves y al grano.
A no ser que tu marca sea formal o tradicional, también puedes experimentar con elementos visuales como emoticonos. Para determinadas audiencias, los emoticonos consiguen que un correo que podría ser aburrido parezca más divertido y relajado, como podría ser el asunto del correo de un amigo. Al menos, eso es lo que vimos en las pruebas A/B que hicimos. También puedes utilizar un poco de jerga informal de internet (como OMG!) en los asuntos y ver si llega a tu audiencia.
También puedes personalizar tus líneas de asunto con el nombre del destinatario, la localidad donde vive u otra información específica suya. Como mencionamos en nuestro estudio con estadísticas de email marketing (en inglés), la personalización puede aumentar las tasas de apertura en aproximadamente un 3% y las tasas de clics en más o menos el 0,5%. En campañas en las que envías muchos emails, estos pequeños incrementos pueden suponer muchas aperturas y clics de más.
Lo más habitual a la hora de personalizar es incluir el nombre del destinatario en el asunto, pero puedes ser más creativo. Puedes adaptar el asunto mencionando el lugar donde vive el lector, su trabajo o empresa, o sus intereses personales.
Si además quieres saber cómo se mostrará el asunto en diferentes pantallas de teléfonos y apps, echa un vistazo a nuestra herramienta de revisión de asuntos, donde podrás ver una simulación de cómo quedará en diferentes pantallas.
3. Utiliza un texto de vista previa como apoyo al asunto
También llamado “preencabezado” (o “precabecera”), el texto de vista previa son las líneas que la mayoría de las apps de correo te dejan ver sin abrir el email, como si fuera un avance de lo que habla el correo. Es como el “compinche” del asunto, ya que tienen el mismo objetivo: animar a la gente a que abra el correo.
Aunque no tiene el mismo peso que el asunto, si quieres conseguir la mayor cantidad posible de aperturas, clics y conversiones, lo mejor es optimizar las dos cosas. La mejor estrategia es añadir en el texto previo un incentivo adicional que no te haya cabido en el asunto, como más información, o incluso un gancho para despertar el interés del lector.
Igual que con el asunto, quieres que sea breve y al grano. Para ello, limítate a entre 40 y 100 caracteres, ¡cuánto más corto, mejor!
4. Elige la herramienta adecuada
Como mucho, tu newsletter será tan buena como la herramienta que elijas para diseñarla. Por eso, es importante utilizar un buen software de email marketing desde el principio.
A la hora de diseñar correos electrónicos, algunas herramientas son mejores que otras. Las funcionalidades de diseño son diferentes en cada plataforma, así que lo primero que tienes que pensar es cuánto te importa tener libertad creativa para tu diseño. Si quieres un control total, necesitarás una herramienta con muchas opciones de personalización. En cambio, si no te importan las limitaciones de utilizar una plantilla, no necesitarás estas funcionalidades de diseño avanzadas.
Si no estás familiarizado con las diferentes plataformas del mercado, puedes leer nuestra guía en la que comparamos las herramientas de email marketing y te explicamos las ventajas y desventajas de cada una para ayudarte a elegir.
5. Aprovecha las plantillas
No te sientas obligado a diseñar una newsletter original desde cero, no hay nada malo en utilizar plantillas. Igual que puedes tener textos estándar (por ejemplo una descripción de tu empresa) que reutilizas, las plantillas de emails normalmente tienen un diseño donde solo tienes que “rellenar los huecos”, añadiendo tu propio contenido a elementos visuales ya existentes.
Los correos creados con plantillas no dan la impresión de ser únicos, y en ocasiones pueden parecer un calco y darte la impresión de que ya lo has visto en algún otro sitio. Sin embargo, no a todo el mundo se le da bien el diseño, así que si te cuesta tener buenas ideas o entender la jerarquía visual, tiene sentido que las utilices.
Solo recuerda que no todas las plantillas tienen la misma calidad. Intenta encontrar una buena plantilla con aspecto moderno y adecuada para el estilo de tu marca.
Si te gustaría probar a diseñarla tú mismo, pero te vendría bien un pequeño empujón para los primeros diseños, busca un programa de creación de newsletters que te guste. Muchos tienen plantillas personalizables, que es un buen punto medio entre utilizar una plantilla más “rígida”, en la que solo puedes editar ciertos campos, y diseñar desde cero.
6. Respeta las directrices de accesibilidad
Seguir pautas de accesibilidad permite que cualquier persona pueda disfrutar de tus campañas de email marketing, e incluso conseguir que sean compatibles con ciertos dispositivos, como lectores de pantalla o controles por voz, que utilizan las personas con discapacidades. Esto es importante para evitar excluir a algunos clientes, e incluso todo lo contrario, hacerles sentir bienvenidos.
En concreto, debes asegurarte de que cualquier persona sea capaz de leer tus correos. Los errores como usar fuentes demasiado pequeñas o usar texto dentro de las imágenes dificultan la lectura a quienes tienen problemas de visión. Por eso, no solo has de prestar mucha atención al tamaño de las fuentes, sino también al contraste entre los colores del texto y el fondo. El contraste ha de permitir que las letras resalten y no se confundan con el fondo, ya que dificultaría la lectura a algunas personas.
Un consejo todavía más práctico: utiliza texto alternativo en todas tus imágenes. Estos textos, que también se llaman “etiquetas alt” o “atributos alt”, son descripciones de la imagen que los lectores de pantallas utilizan para narrárselas a quienes no pueden verlas.
7. Haz pruebas A/B para optimizar cada una de las partes
Adivinar qué podría funcionar nunca es tan bueno como saberlo a ciencia cierta. La cuestión es, ¿cómo puedes saber cuál será el resultado de algo antes de hacerlo?
La mejor respuesta la obtendrás haciendo pruebas A/B. Estas pruebas consisten en mostrar diferentes versiones de un email y ver cuál gusta más. Si estás utilizando un buen programa de email marketing, puedes incluso hacer la prueba enviándolos a personas con las mismas características demográficas y psicográficas que tu audiencia.
Básicamente, lo que haces es preparar dos diseños diferentes de newsletter que enseñas a personas de características similares a tu audiencia objetivo para analizar el rendimiento de cada una y decidir cuál es mejor. Pero lo bueno de las pruebas A/B es que te permiten probar cada una de las variables de forma independientes, así que también puede utilizarlas para decidir entre dos asuntos diferentes, dos textos de vista previa, diferentes llamadas a la acción o incluso nombres del remitente.
Todo esto puede ayudarte a encontrar la mejor combinación de elementos de diseño que más gusten a tu audiencia (y con las que tendrás mejores conversiones).
Conclusión: Cómo diseñar una newsletter
Uno de los problemas a los que se enfrentan los propietarios de muchas empresas pequeñas y medianas es que normalmente no son diseñadores. Y, si estás empezando o tienes un presupuesto limitado, no siempre puedes permitirte contratar a un diseñador profesional, ¡pero tampoco enviar correos descuidados!
Hoy en día, el email marketing es una de las estrategias de ventas más eficaces que hay. Prácticamente todo el mundo tiene una dirección de correo, y enviarles un email crea una conexión personal y directa que puede hacer que rápidamente se conviertan en fieles clientes. No quieres dejar de utilizar este lucrativo enfoque de marketing solo porque no se te dé bien diseñar newsletters.
Como ya he mencionado, siempre puedes utilizar una plantilla. Si eliges un buen proveedor de plantillas, puedes tener un email con un diseño profesional por mucho menos de lo que pagarías a un diseñador. Las mejores utilizan técnicas de diseño vanguardistas para darles un aspecto moderno. El inconveniente que tienen es que son menos originales, pero sigue siendo mejor que mandar algo descuidado (o que no enviar nada).
Si necesitas ayuda para diseñar una newsletter, siempre puedes leer otros de nuestros artículos donde te damos consejos para hacerlo. Un buen punto de partida es nuestra exhaustiva guía sobre cómo hacer una newsletter, en la que te lo explicamos todo, desde el software para crear los correos hasta formas de conseguir más suscriptores, sin dejar de lado las cuestiones legales.
Si tienes alguna pregunta concreta sobre cómo diseñar los correos de tus campañas de email marketing, ¡déjanosla en los comentarios!
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